KATERINA PLAMENOVA PETROVA | Fotografía: Ainhoa de la Huerga |
El ultimo viernes del mes de noviembre es famoso por ser el llamado ‘Black Friday’. Se trata de una tradición norteamericana que en los últimos años se ha extendido por todo el mundo. En este día, la gente se vuelve loca por las compras, en busca de descuentos descomunales y ofertas que en ninguna otra época del año se dan. Todo, para hacer los regalos de navidad e impresionar a los más cercanos. Pero, ciertamente, a parte de celebrarse este día como ‘el día de las compras’, también se celebra el ‘Día Mundial Sin Compras’.
El día mundial sin compras, también llamado ‘Green Friday’ o ‘Buy Nothing Day’ se celebra desde 1992, cuando se comenzó a examinar el consumo excesivo. En 1997 este día se trasladó al mismo que el Black Friday, lo que creó una enorme controversia.
La mayor parte de los canales televisivos se negaron a publicitar algunos anuncios relativos a este día, comenzó así una gran variedad de campañas en 65 países. Entre ellos estaban Estados Unidos, Reino Unido, Suecia, Alemania o Japón.
Las campañas han sido y son apoyadas por ecologistas que lo único que quieren es que de alguna forma se pare el consumo excesivo. El consumismo es dañino para el medio ambiente. Estas personas, durante 24 horas, el tiempo que dura el Black Friday, se abstienen de comprar cualquier tipo de cosa.
Es también típico ver manifestaciones delante de los centros comerciales o de las tiendas para hacer saber a la gente, mediante estas exhibiciones, el mal habito de consumo y promover así un consumo responsable.
Por otro lado, el Black Friday es también el que da comienzo a las campañas navideñas, cuando las grandes marcas realizan descuentos y rebajas increíblemente llamativas. La primera vez que se dio este hecho fue en 1961 en Filadelfia, Estados Unidos. A partir de entonces, cada vez se hace en más ciudades. En España, se hizo famoso este día en 2012 y actualmente es uno de los países con más ventas.
Por muy increíble que suene, está demostrado que las ofertas y descuentos realizados durante el Black Friday pueden resultar un timo. Días previos a este, las marcas incrementan el precio de sus productos y, en este día, le rebajan el precio, para que parezca que en verdad se esta adquiriendo a menos precio. En realidad, resulta un engaño.
Es cierto que no todas las marcas hacen eso, pero este día es sin duda uno de los que más se gasta respecto al resto del año. Por esta misma razón, año tras año se ven colas inmensas de personas que esperan a las afueras de las tiendas durante horas, con tal de comprar los productos deseados.