Miguel Li Fernández Fernández | Fotografía: Miguel Li Fernández
Almudena Ariza, periodista, ha estado durante más de 14 años fuera de España contando historias de todo tipo, desde los Oscars a la guerra de Afganistán e Irak, pasando por el desastre del tsunami de Japón. Su carrera empezó en Radio Algeciras, ha pasado por la COPE y ahora está en RTVE, en la de todos, como quiere recalcar la gaditana en un encuentro en el marco de ‘Cronistas del Siglo XXI’.
Todo un encuentro que ha seguido por decenas de personas interesadas en la veterana reportera y que sigue en activo. Ahora mismo está presentando un programa que lo a calificado a medida de ella: Españoles en conflicto. Un programa que lleva dos capítulos y que relatan la cruda realidad de diversos lugares como Estados Unidos con las armas o Corea del Sur con el perfeccionismo.
Un proyecto para una persona “interesada en el mundo, en la aventura humana, de cómo la gente (…) vive en esas circunstancias y sobrevive”. Recalca que todo el mundo conoce Españoles en el mundo, el lado bueno, pero la vida no es como se pinta y se ve a través de la cercanía de los españoles, los problemas estructurales, de una forma menos encorsetada que los telediarios.
Una persona al que le han ofrecido un trabajo que le viene como anillo al dedo y cuyo primer capítulo se basa en el problema de las armas, en como algunos españoles han asumido el hecho de vivir con ellas, algo a lo que ella no aspiró a empuñar nunca, ni como corresponsal ni como parte del reportaje. Eso significa todo un alegato en un país donde la cultura de las armas está impregnado en la literatura infantil: “ incluso para captar niños (la Asociación Nacional del Rifle) hicieron una edición de cuentos tradicionales en la que caperucita, si tuviera un arma, podría haber matado al lobo”.
El segundo capítulo se sitúa en Corea del Sur. A raíz de una reacción en redes sociales, Almudena Ariza comenta la importancia del capítulo de Corea del Sur: “(debido al auge del K-pop) qué hay detrás de todo esto: todo un laboratorio de fabricación de jóvenes ídolos que suscriben unos contratos casi de esclavos (…), está bien saberlo”.
El programa fue emitido no precisamente en Prime Time y aun así ha terminado la emisión con más espectadores que al principio. En un programa de la casa, RTVE, y de la cual ella defiende que no es como alguna gente piensa apelando al rigor frente a otros. “Hay una estructura muy férrea, hay una reacción muy profesional”. Una cosa importante para la profesión, para ella, es el hecho de que tienen un departamento exclusivamente para la verificación de datos. “ No está reñido el tener rigor y el ser veraz con ser entretenido”.
‘The world needs journalists (El mundo necesita periodistas)’ Así decía en su camiseta con la que se presentaba en el programa de Broncano, todo un lema, ante una situación de sobrecarga informativa. Fenómeno que para ella, los profesionales tienen parte de la responsabilidad por la cual los espectadores se “aburran”.
Ariza ha señalado que hay mucho machismo en el periodismo de guerra. En su día, no tenían chalecos antibalas. Una guerra en la cual las mujeres suelen hablar de la vida mientras que los hombres hablan de estrategias militares y por parte del trabajo, ella recibió pedradas por no llevar bien el velo. Eso sí, lo que es igual para todos es el peligro, buena prueba de ello es que en una ocasión no fueron en un convoy militar atacado por fuego amigo en Irak.
Si hay algo que le ha sorprendido en su carrera ha sido el vuelco de las elecciones estadounidenses luego del anuncio de que Trump se presentaba a las elecciones presidenciales. Ella fue la enviada a cubrir dichos actos y es donde percibió como la cola de seguidores estaba formada por gente con pensamiento ‘muy paleto, cerrado’. Eso, sumado al seguimiento del juego por parte de los medios lo que derivó en su victoria.
Antes de este programa ‘fue’ jefa de los servicios informativos de la casa de forma breve. Todo un puesto que ella visionó como una oportunidad de cambiar RTVE para que evolucionase con respecto de países: podcast o programas a la carta, entre otros. Un proyecto que no duró mucho “no debido a los palos que me ponían, sino a los que ya había”. Pero también destacó que hay una redacción donde la presencia femenina es mayoritaria por pura aritmética, no tendencia como pueden apuntar algunos.
Un encuentro que duró más de una hora y media donde dio pie a que nos descubriera parte de RTVE. Además, nos ha enseñado la vida desde su punto de vista, la de una persona cosmopolita que ha vivido en diversos países y ha estado en diversos lugares conflictivos como es Corea del Norte; a pesar de que su carrera estaba enfocada en un principio en la guitarra.
