BELÉN RODRÍGUEZ FERRERO | Fotografía: Pixabay
Todos los usuarios de Twitter saben lo que son los hilos. Para los no usuarios de esta red social, un hilo de Twitter es una serie de twits con la misma temática y creados por la misma persona conectados. Esto se debe a que la aplicación tiene un número máximo de caracteres, concretamente, 280. Es por ello que si se trata de explicar o contar un suceso más largo se necesitan varios twits para la misma temática, y es ahí donde nacen los hilos.
Con la evolución de la plataforma, han surgido también hilos de fotos, donde el texto protagonista de los twits puede ir acompañado de una imagen y, en ocasiones, es la imagen la que no necesita texto.
Los hilos pueden contar noticias en directo debido a su rapidez a la hora de desarrollarlos y publicarlos, historias ficticias, sucesos o, en el caso protagonista de hoy, imágenes. Y es que han surgido una serie de hilos que, como sus nombres indican, muestran “fotos históricas que quizás no habías visto antes”. Estos hilos exponen imágenes de todo tipo: acontecimientos mundiales, personajes -conocidos o desconocidos-, menores, iconos cinematográficos…
Difusión de las imágenes
¿Es correcta moral, ética o legalmente la difusión de estas fotos? En primer lugar, difundir fotos sin consentimiento de las personas que aparecen en ellas es un delito, ya que se está vulnerando el. honor y la intimidad de estas. Por otra parte, si la persona puede identificarse a través de la fotografía, se puede considerar una infracción de la Ley de Protección de Datos. Publicar fotos sin consentimiento en internet también se considera una infracción, igual de importante que si se publicase sin consentimiento en los medios convencionales, ya que la imagen se puede difundir muy rápido. Además, las fotografías están sujetas a derechos de autor, por lo que también se podrá estar delinquiendo contra el autor de la obra. Por lo tanto, son varias las infracciones que se pueden llegar a cometer con la difusión de una sola imagen.
En redes sociales, se pueden publicar imágenes sin el consentimiento de otras personas siempre y cuando se mantengan en el ámbito privado, ya que se consideran de uso doméstico. Ahora bien, se deja de considerar así y se necesita un consentimiento cuando cualquier persona pueda acceder a esas imágenes (perfil público), el perfil pertenece a una empresa profesional o si aparecen menores de edad.
Si publican tus fotos sin tu consentimiento…
En el caso de que se publiquen fotos sin el consentimiento de la persona que aparece en ellas, esto se puede denunciar ante la policía o el juzgado para conseguir que el autor de la ilegalidad sea castigado penalmente. De esta manera, las penas y multas -dependiendo de la gravedad de la difusión y de las personas implicadas-, podría ir de entre 3 meses hasta 4 años de prisión. La condena mínima se llevaría a cabo si una fotografía se obtiene con consentimiento pero se publica sin él y todavía existe un vínculo de afectividad, o si la víctima es menor o posee una discapacidad.
Hay un gran rango de penas por este delito que, al parecer, es inofensivo y fácil de cometer. Es por ello que lo mejor es difundir únicamente las fotografías tomadas por los propios usuarios en las que no aparezca nadie sin consentimiento.