ANDREA NAVARRETE DEHOLLAIN | Fotografía: A. Navarrete |
Una de características de una noticia es que cuente con factor importante: proximidad. ¿Qué sucede con un evento importante que no tiene este principio? ¿Acaso por eso no es noticia? En un amplio palacio de Valladolid, construido en 1486, encontramos un rincón para haber de crisis olvidadas. Con esas grandes paredes de corte renacentista y arcos de medio punto, el ojo presencia un parto rural en Etiopía y el corazón late un poco más rápido ante la historia del pequeño que se llevan en Palestina
Reflexionamos un poco sobre las grandes crisis con la exposición Testigos del Olvido #2. Se inauguró el pasado 27 de abril y continuará hasta el 22 de mayo en el Palacio Santa Cruz. Esta organizada por Médicos Sin Fronteras (MSF) y El País Semanal. Contó con la participación y cofinanciamiento de la Universidad de Valladolid, que ha cedido el espacio gracias al apoyo del Fondo de Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Fundación Jiménez-Arellano Alonso.
Presenta una serie fotográfica de Juan Carlos Tomasi y reconocidos escritores como Martín Caparrós, Santiago Roncagliolo, Laura Restrepo y Manuel Rivas. La intención es rescatar cuatro grandes crisis junto con las comunidades afectadas. Hay un olvido mediático que se presenta en todas y, a través de fotografías y pequeñas historias, se acerca al hombre a esa lejanía que solo parece ubicarse en un mapa.
La muestra presenta 40 fotografías y un vídeo que explica las problemáticas que se viven en estas crisis: territorios palestinos ocupados, Níger, Etiopía y Colombia. En los textos de estos escritores se presenta el contacto humano y periodístico con la población. Esta es la segunda parte de un proyecto que comenzó en el 2009 con la misma finalidad, acercar al hombre a esas vidas precarias que tanto se desconoce.
Al llegar al Palacio, comienza la exposición con los territorios palestinos ocupados, de la pluma de Martín Caparrós. Cuenta cómo en medio de una noche entran unos soldados armados y se llevan a Leith, un pequeño niño de 14 años. El día a día es una violencia desatada que ha dejado secuelas en sus habitantes.
Y luego hablamos de la sequía. ¿Qué sucede en aquellos países que se ven afectados por el fenómeno del Niño? Antes de nada, ¿conocíamos ese fenómeno? Nos tropezamos con la realidad de Níger y con Santiago Roncagliolo, que nos la cuenta. Explica cómo les afecta la escasez, cómo no tienen ya reservas en sus graneros porque no han podido cosechar. Esto va de la mano del aumento de enfermedades o desnutrición infantil, entre otros problemas.
Seguimos caminando y tropezamos con una de las imágenes más llamativas de la exposición, una mujer dando a luz en una de las condiciones más precarias vistas. En Etiopía, Laura Restrepo narra un parto que presenció en una zona rural. Palpó la escasa atención médica que puede haber. Y si nos vamos a las estadísticas que presenta la nota de prensa de la exposición, podemos decir que cada 40 minutos muere una mujer durante el parto o embarazo.
Nos alejamos de ese lado del globo y pisamos Suramérica. Es Manuel Rivas quien presencia lo que se vive en la cordillera del Cauca y una problemática rodeada de extorsión, desapariciones y asesinatos. Todo cometido en una población completamente rural que tiene secuelas psicológicas gracias por la violencia que se vive día a día. Rivas nos habla de la identidad del dolor, de “la última lágrima” y, por último, de la pena moral y cómo un joven cuenta cómo se quita la vida su madre.
Una de las mujeres que forma parte del gran equipo de Médicos Sin Fronteras es Raquel González, delegada de esta asociación en Castilla y León: “Queremos mostrarle a la sociedad civil qué estamos haciendo y qué está pasando en las poblaciones que atendemos”. Explica que esto se logra mediante exposiciones como la que se realiza en el Palacio de Santa Cruz o con mesas redondas como la que tuvo lugar el martes 10 de mayo en las mismas instalaciones.
Raquel expone que estas manifestaciones permiten acercar al público una realidad muy lejana. Comenta: “Una imagen vale más que mil palabras, esta exposición me gusta especialmente porque intenta rescatar cómo es el día a día y la cotidianidad”. No se trata sólo del trabajo de estos médicos, sino de las condiciones de vida de la gente. “Nos interesa a veces sólo lo que tenemos cerca, entonces hay que pensar en cómo hablar de estas realidades”, explicó González.
A la audiencia se le llega con los medios y, precisamente por eso, acudieron a El País, algo que ha posibilitado una difusión masiva. Todo ello, claro está, junto a escritores de renombre y al ojo de Tomasi. La elección de Etiopía y Níger se sustenta, principalmente, en la crisis olvidada que hay en estas regiones, que, aunque cuentan con un grado de desarrollo superior a otros lugares de África, algunas de sus zonas no tienen, por ejemplo, ningún tipo de atención médica. En cuanto a Colombia y Palestina, se decantaron por ellas por tratarse de conflictos que llevan un tiempo establecidos. Raquel también explica que, aunque hubiesen querido abarcar más, hay ciudades o países que por cuestiones de seguridad no permiten una cámara.
En cuanto a su sede, han escogido la ciudad que atraviesa el Pisuerga porque Médicos Sin Fronteras lleva tiempo trabajando en Valladolid tanto con voluntarios de la Facultad de Medicina como con la población civil. Cuenta Raquel que, ya en 2012, se realizó una campaña llamada Valladolid Sin Fronteras que, mediante diferentes actividades, buscaban hacer llegar estas realidades. Gracias a la cofinanciación de la Universidad, se pudo concretar toda la parte logística.
Por otro lado, para entender cómo funciona directamente esta organización, Germán García, que trabaja en MSF como coordinador de proyectos en terreno, explica cómo se trabaja en países como Etiopía. Cuando se les alerta de la sequía, ellos se preparan para realizar una evaluación médica y, posteriormente, deciden actuar junto con un equipo de logística, otro administrativo y financiero. Explica él que, «cómo afrontamos trabajar en áreas de conflicto, en las cuales los centros como hospitales y centros médicos son un objetivo militar válido, es la mayor dificultad en las que estamos envueltos”.
El pasado día 10, se realizó una mesa redonda para cerrar el día con un broche de oro. Contó con Raquel González, Germán García y Arantxa García, periodista de Europa Press. Esta última hizo entonces una reflexión sobre la actividad que realiza diariamente el periodista. “Soy crítica con el compromiso que deberíamos tener y no tenemos”, manifestó abiertamente. Y es que, de este modo, volvemos al concepto de cercanía: un suceso no deja de ser relevante porque no comparta el criterio de proximidad. Arantxa explicó que el profesional de la prensa es una persona con intereses definidos y que, por tanto, depende mucho de su sensibilidad descartar algunos o colocarlos en la palestra.