BELÉN RODRÍGUEZ FERRERO | Fotografía: Pixabay |
La primera acepción que ofrece la RAE para explicar la palabra ‘madre’ es ‘mujer que ha concebido o ha parido uno o más hijos’. Está claro que todos los seres humanos tienen una madre pero, ¿tienen todos una mamá?
Lo más probable, es que el significado de la palabra ‘mamá”’ varíe dependiendo de quién responda. Algunos se guiarán por la ciencia y defenderán que es la persona que les ha dado la vida. Otros, guiándose por la avaricia, podrán decir que es quien les mantiene. Hay infinitas definiciones para esta palabra, por ello, cada persona solo podrá hablar desde su propia experiencia.
Personalmente, podría definir la palabra ‘mamá’ con las palabras amor, cariño, atención, lucha y hogar.
Siempre está dispuesta a dar una muestra cariño. En algunas situaciones más que en otras, pero siempre lo acaba haciendo. En los reencuentros, tras mucho tiempo sin estar con ella, puede llegar a ser tan cariñosa que da lugar a cuestionarse los límites del espacio personal o de la privacidad. Tras haber discutido, puede tardar más o menos tiempo en volver a mostrar cariño, pero siempre acaba haciéndolo, aunque comience con una tímida sonrisa o una broma amistosa. Es la prueba de que cuando hay amor se puede rectificar y dar las oportunidades que sean necesarias.
Presta atención a detalles que poca gente recuerda -para bien y para mal-. Se acuerda de fiestas, citas, exámenes y trabajos. Incluso de la comida favorita de la gente a la que más quiere, y a veces les sorprende con ella. Su atención hace que pueda ver cosas que nadie más ve, y advierte a los suyos de las posibles consecuencias que pueden tener sus actos. A pesar de las advertencias, si estos no hacen lo que ella les recomendó, es la encargada de solucionar la situación, aunque no sea ella la culpable o la encargada de solventar la situación y, si es necesario, consolar a quien lo necesite. Es decir, se encarga de arreglar lo que ella nunca rompió.
Es capaz de sacar las garras por los suyos las veces que haga falta, aunque eso signifique llegar a hacer sangrar las suyas propias y decir que ella está bien. Al margen de lo físico, muestra su valentía a la hora de dejar volar lo que más quiere, aunque ella preferiría cambiar esas alas por cadenas para tenerlo siempre cerca.
En definitiva, es la personificación del amor y del hogar. De un amor verdadero y sano, capaz de traspasar los cinco sentidos, porque hay un sonido, una imagen, un olor, un sabor y un abrazo que recuerdan al calor del hogar de mamá, y eso siempre será eterno. Da igual la sangre, la raza o la distancia, porque quien tiene una mamá tiene algo infinito e incondicional.