Edu Galán, de Mongolia: «La sátira tiene por debajo una reflexión»

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Diego Arias.
Edu Galán, Mongolia.
DIEGO ARIAS MARTÍNEZ | Fotografías: Diego Arias | Vídeo: María Guerra

A falta de cinco minutos para las 12.00 horas del día 21 de noviembre, la gente comenzaba a aglutinarse en la entrada del Salón de Grados de Filosofía y Letras. Muchos de los asistentes esperaban con impaciencia la llegada de Edu Galán, uno de los creadores de la Revista Mongolia. Con varios tipos de ejemplares disponibles para todo aquel interesado, muchos se hicieron con al menos una de las publicaciones, divertidos por las imágenes satíricas que copaban las portadas. Otros esperaban la apertura de puertas con la mejor arma para vencer el frío pucelano: un café bien caliente.

Cuando por fin hizo acto de presencia, se abrieron las puertas de la sala y todos ocuparon las butacas hasta el lleno absoluto. Nadie estaba dispuesto a perdérselo. Lo que nadie se esperaba era que Galán diese un toque renovado a la conferencia, sin complejos ni tapujos, asestando puñaladas de realidad a las conciencias de los asistentes a través de la sátira. A los pocos minutos de dar comienzo, Edu Galán dejaba patidifusos a muchos docentes e incluso a algunos alumnos con la frase “no vayáis tanto a clase, las notas no son tan importantes”; en realidad se refería a que está mejor salir a la calle y contarlo, ya que en el currículum prima más el haber escrito historias que haberlas estudiado.

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Edu Galán durante la conferencia | Fotografía: Diego Arias.

Otro de los consejos que dio al alumnado fue la importancia que tiene la forma y el fondo en periodismo, así como el formato e incluso les recomendó hacer algún curso de diseño. También hizo mención a la lectura y apuntó que el estilo proviene de esta. “No hay nada más patético que un periodista que se cree que lo sabe todo. Si no leéis, vuestra escritura va a ser como un palo gilipollas”, ha afirmado rotundamente.

“Vivimos atados al diseño. Importa la forma y el fondo y el formato es muy importante”


Galán presentó su trabajo en Mongolia con un “nosotros trabajamos en los bares, no tenemos redacción propiamente dicha”. Su función en la revista es de corrector y resaltó la idea de que ellos hacen sátira y no humor; esta idea consiste en hacer críticas mediante la grosería, la barbaridad e incluso el mal gusto pero, por debajo de la sátira, hay una reflexión. “Mongolia no hace críticas sobre la política, la economía o la banca sino que trata de ir contra los poderosos, dando nombres y dando voz a la gente que no tiene tanto poder como nosotros”, ha argumentado. Por otro lado, también hizo hincapié en la importancia de que sus lectores sean críticos y que no siempre estén de acuerdo con ellos. “Si soy un periodista de calidad, haré llegar al lector nuestra idea y no trataré de imponérsela”. Respecto a cuál es su límite, el periodista señala que es la legalidad ya que lanzan estímulos muy potentes para concienciar sobre la realidad tan salvaje en que vivimos.

«Los chistes son una herramienta para tratar de llegar a una reflexión de nuestra ideología»


A lo largo de la conferencia, Galán mostró alguna de sus portadas más icónicas y explicó tanto su significado como el mensaje que querían transmitir con ellas. Portadas como Vieja de mierda (Esperanza Aguirre) –que para él es una de las mejores-, La Niña de Rajoy (Susana Díaz) o Podemos (un chiste sobre Francisco Nicolás). Entre algunas de las explicaciones y justificaciones a por qué esos titulares y portadas, el público prorrumpía en aplausos y con grandes carcajadas, divertidos ante el tono de la charla.

Otro de los aspectos a los que también dedicó unas palabras fue a los medios. En este aspecto, realizó una crítica a los propios medios y cómo gestionan y buscan el clic fácil en sus noticias, a la par que recomendó al público el libro Papel Mojado, en el que se tratan las luchas internas que existen en cada medio y a quién pertenecen, entre otros datos. Aquí también mostró portadas de Mongolia que imitaban a los grandes periódicos de tirada nacional y se burlaban de ellos a través de sutilezas y tirando, por supuesto, de ironía.

En la conferencia hubo tiempo para anécdotas que tuvieron lugar como consecuencia de alguna de sus portadas más polémicas como la de El pendón inglés (imitando al Corte Inglés) o No al aborto… hágalo por el orto. En la primera situación, la revista recibió un burofax de la empresa pidiéndole que retirasen todos sus ejemplares. Mongolia no lo hizo y la marca compró todos los ejemplares disponibles en sus grandes superficies con el fin de evitar que sus clientes la adquiriesen. Por otro lado, en la segunda, el titular grande era “No al aborto” por lo que muchos intrépidos tuiteros se lanzaban a compartir el mensaje sin ver la segunda parte del mensaje, que era “hágalo por el orto”, lo que provocó una oleada de reacciones en redes.

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Edu Galán atiende a los redactores de InformaUVa | Fotografía: Diego Arias.

Otros temas que también abordó en la charla fueron la monarquía, con portadas como El Rey podría violarte (haciendo referencia al carácter inviolable e inimputable de su figura) u otra relacionada con la infanta Elena en la que se le calificaba de Hija de puta (una portada en la que, según sus palabras, el titular se les quedaba grande y en realidad se trataba de “Hija de imputada”) y también la religión con Empieza la Yihad (una caricatura de Cristo con bombas). Este segundo aspecto es muy importante para Mongolia ya que uno de sus objetivos es atacar al poder religioso porque, según ellos, la Iglesia quiere acaparar todos los espacios públicos. Otras portadas llamativas dentro de esta temática son ISIS Christmas, con miembros de la Yihad poniendo un árbol de Navidad con cabezas decapitadas, o Viva Cristo Gay (Jesucristo dibujado con un corazón con los colores del Orgullo).

Dentro de este último apartado, encontramos la que para Edu Galán ha sido el lío más grande en el que se han metido. Con motivo del anuncio de la llegada de Mongolia, el Musical 2.0 a Murcia, parodiaron una imagen de la Virgen de la Caridad al ponerle el rostro de Trump a su figura y la cara de Clinton al niño de sus brazos. Esto provocó un rechazo en la comunidad cristiana de Cartagena y se realizó una manifestación a las puertas del teatro en el que actuaban e incluso se llegó a dar una misa por parte del obispo y unos 700 fieles en su contra. Además, generaron gran controversia en redes sociales, aunque eso es parte de su día a día. El propio Galán aprovechó para hacer promoción del musical (sin canciones) de su revista (Mongolia, el Musical 2.0), que llegará a Valladolid el 13 de enero del año próximo.

Para concluir, Galán hizo referencia a que el miedo a ofender y la libertad de empresa, a veces inexistente, hace que mucha gente no se dedique a la sátira puesto que existe una autocensura muy fuerte tanto por parte de los medios como por parte de la sociedad. Al final de la charla, hubo tiempo para responder a preguntas, tomarse unas fotos o firmar ejemplares a los asistentes.

 

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