AINHOA DE LA HUERGA CELESTINO | Fotografía: Ignacio Repilado |
Los ciudadanos manejan una gran cantidad de datos e Internet es una fuente continua de información. Ante un mundo complejo repleto de grandes listas de números y herramientas multimedia, nacen nuevos perfiles periodísticos como es el periodista de datos. Esta nueva salida profesional consiste en recoger y analizar un gran volumen de datos a través de herramientas informáticas, con las que interpretar la información para la audiencia por medio de artículos, infografía o aplicaciones interactivas.
La materia prima que se emplea suele provenir de portales de datos abiertos como el de la Junta de Castilla y León, en el caso de nuestra comunidad. Se trata de grandes bases de datos que proporcionan a través de diferentes formatos como ‘csv’ que puede abrirse como archivos de Excel. Esta salida está indicada para aquellos a quienes les guste trabajar con este tipo de herramientas o la estadística. Si bien se trata de una salida menos explorada, resulta muy útil para analizar e interpretar la realidad.
Una aplicación práctica de este tipo de trabajo y muy actual es el análisis de datos del COVID-19. Permite establecer la curva de contagios y los mapas interactivos de incidencia, entre otros muchos datos de referencia que se emplean hoy en día para medir los efectos de la pandemia.
Este examen cuantitativo y empírico del tratamiento de datos permite obtener información muy precisa sobre la realidad en la que nos encontramos sumergidos. Las bases de datos y las nuevas necesidades que nacen de la sociedad de la información han llevado al desarrollo de las nuevas tecnologías. Esto permite establecer conexiones y encontrar las pistas que llevan a las noticias y reportajes. Se trata de una salida profesional emergente y necesaria para la comunicación y el periodismo actual.
Según la especialista en periodismo de datos, Sandra Crucianelli, esta rama forma parte de lo investigativo, hace un análisis en profundidad y se caracteriza por ser especialmente preciso. Se trata de un periodismo que se basa en los procedimientos propios del periodismo asistido por computadora, si bien, supera con creces esta especialidad y se podría considerar su antecesor.
En un momento en el que la tecnología reina en la vida cotidiana, no se puede olvidar la constante actualización del periodismo. El periodismo de datos es una tendencia creciente que, al igual que otras nuevas formas de comunicar, se adapta a los tiempos modernos de un mundo en continuo movimiento y cambio.
El uso de tablas dinámicas con las que analizar datos, herramientas interactivas y análisis de la realidad cuantitativa son parte del día a día del periodista de datos. Esto permite una recreación gráfica de la realidad. Sin embargo, para que pueda existir esta rama es necesario tener determinadas legislaciones de transparencia que proporcione bases de datos abiertos con los que poder trabajar desde una información verídica sobre diferentes temáticas.
La necesidad de estos datos y del desarrollo de nuevas tendencias en comunicación son imprescindibles para dar continuidad al periodismo como herramienta de interpretación de la realidad. Para formarse en estas técnicas existen numerosos máster que proporcionan los conocimientos necesarios. Algunos ejemplos son los impartidos por la Universidad de Nebrija, la Universidad de Alcalá o la UNIR.