AINARA ÁLVAREZ GONZÁLEZ | Fotografía: Printerval |
El regreso de Quevedo, uno de los cantantes de música urbana más escuchados, ya está aquí tras su desaparición repentina a principios de 2024, un paréntesis que dejó a todos su seguidores y a la industria musical expectantes. Tres meses jugando al despiste y lanzando pistas a través de sus redes sociales, Quevedo finalmente anunció su regreso con el lanzamiento de Buenas Noches, un nuevo disco que no solo marca su vuelta, sino también una evolución notable en su estilo y enfoque artístico.
Este regreso motiva a reflexionar sobre la razones que motivaron su retiro, un tema que quedó en el misterio durante su ausencia. ¿Fue la presión del éxito? ¿La necesidad de replantearse su carrera o encontrar un equilibrio entre su vida personal y profesional? Estas preguntas surgieron en torno a su figura mientras la incertidumbre se apoderaba de sus seguidores.
Unos de los momentos más significativos de su ausencia fue su breve aparición en el Festival Bigsound de Valencia en junio. Lo que parecía un regreso inminente, se convirtió en una vuelta a la espera. Durante los meses siguientes, Quevedo alimentó la expectativa con publicaciones en Instagram, que ofrecían pistas de su retorno y su nuevo proyecto musical.
Su nuevo álbum es una muestra clara de la madurez adquirida durante ausencia, un trabajo que refleja tanto su evolución personal como profesional. En un entorno musical cada vez más marcado por la sobreexposición y la constante producción el tiempo de pausa del cantante resalta que a veces la retirada es necesaria para lograr una verdadera transformación artística. Además, en la era de las plataformas de streaming y redes sociales la industria musical exige una constante presencia mediática.
Este nuevo trabajo afirma su identidad, mostrando un regreso con nuevas canciones y una visión más madura y consciente de sí mismo. Su regreso es una reflexión sobre el proceso creativo, la transformación personal y cómo el arte puede sanar, conectar y evolucionar.
