IRIS LEÓN ANTOLÍN | FOTOGRAFÍA IRIS LEÓN
Ante la expectación del público se hizo un sonoro silencio cuando entró la persona por la que todos nosotros estábamos ahí. Carlos Franganillo, hizo acto de presencia y todos le observamos con curiosidad, nos saludaba con una amplia sonrisa y se sentaba. Detrás de él se podía observar una fila de cámaras y micrófonos que le seguían.
Los entrevistadores pasaron también a la sala y se sentaron a los lados del presentador, después de unos cuantos minutos, empezó la acción. Le dieron la bienvenida y le presentaron, aunque creo que todos los presentes sabían quién era, ya que esa era la razón de nuestra estancia en la sala.
Con gran emoción los entrevistadores mencionaron su trayectoria como periodista en el ámbito televisivo y como corresponsal en Washington D.C y Ucrania y su gran experiencia en el ámbito internacional. En relación a esto, se le preguntó su opinión ante el gran conflicto presente entre Palestina-Israel, con elocuencia respondió: «No soy un experto en este conflicto como podría suceder con el caso de Ucrania pero, sin duda alguna, es un conflicto demasiado complejo y hay que tratar el problema con cuidado». A lo que también añadió: «Esto ha hecho ver al mundo los fallos de sistema en la seguridad de Israel y una gran humillación nacional aparte de ver las heridas del pasado «
Dejando los conflictos por un lado, le preguntaron sobre la polarización de los medios y cómo dejan entre ver el malo y el bueno de la historia.
Respondiendo Franganillo con diligencia y sinceridad: «No hay ni buenos ni malos en este mundo. La polarización presente en los medios de comunicación siempre ha existido. Sim embargo, ahora podemos notar más su presencia debido a que se han intensificado gracias a las innovaciones tecnológicas. Sobre todo, desde que la política lo utilizó como herramienta para la difusión como Trump «. «El periodista no puede dejarse contagiar por la corriente «, concluyendo su intervención.
Para en la siguiente pregunta mencionar su gran conexión con el Este Europeo. Quién estuvo presente en Ucrania cuando se hizo la Eurocopa de 2012, centrándose en reportajes de la situación social en la que se vivía en aquel momento. Ya que en el 2013 hubieron graves protestas concluyendo con el derrocamiento del gobierno y la rápida invasión de Crimea.
Televisión Española hizo un telediario especial desde Kiev a una semana de que iniciará la guerra, mostrando el panorama hostil y devastador. «Esto no beneficia a Ucrania pero, a largo plazo puede beneficiar a Rusia. Opino que la única solución a esto es el diálogo entre ambos países «, sentenció Franganillo.
Al concluir con el problema en Ucrania, nos pusieron el tráiler de una serie documental llamada 10.000 días en la que Carlos Franganillo participaba.»El objetivo del documental era dibujar un futuro lejano que no fuera apocalíptico ni tenebroso pero, tampoco optimista y utópico «.
Habla de temas importantes como el cambio climático o la emergencia de las inteligencias artificiales. Como poco a poco nuestra manera de comunicar, interrelacionarse mundialmente y hacer periodismo esta evolucionando al igual que nuestras tecnologías. Pero, también hace alusión al control y vigilancia en la que nos podemos ver envueltos.
¿Por qué quiso ser periodista?
Con gran elocuencia nos relato que en su infancia leía muchos periódicos, veía televisión y radio. Esto hizo que tuviera un gran conocimiento de la perspectiva internacional. Aparte, afirmo que la figura de Superman o Clark Kent como periodista fue la admiración que puso esta profesión en su camino.
Aunque hiciera la carrera de comunicación y audiovisual fueron las prácticas de un verano en Oviedo lo que hicieron que definitivamente se decantara a dedicar su vida a la información. Entrando por fin, en 2008, a la cadena que expandió su carrera como periodista. Afirmando que sus primeros pasos como corresponsal fue un viaje a Tailandia por un intento de golpe de estado. Sin embargo, lo que le concedió una cobertura mundial hacia su trabajo fue al cubrir los mineros atrapados en Chile sin apenas descanso pero, mereció la pena.
Su esfuerzo fue recompensado, y es que fue mandado a Rusia como corresponsal en Rusia. Tanto fue su compromiso que hasta intentó aprender el idioma pero, según sus palabras: «Cuando baje del avión, el 2 de enero a las 4 de la tarde solo veía un oscuro paisaje sin nadie por los alrededores». La ilusión que traía en el avión se congeló pero, dio paso a prejuicios y temores ante un nuevo país.
Sin embargo, se acostumbró. Con gran resiliencia y valentía. Estudió todo tipo de cosas, historia, geografía …. Pero, «hagas lo que hagas, solo el tiempo te da el conocimiento «, afirmó. Concluyendo que le llevó 2 años hasta que pudo llegar a conocer mejor el país donde no solo vivía sino que también, a través de sus palabras mostraba al mundo otro país.
«El periodismo en Rusia para los periodistas extranjeros no es peligroso pero, para un periodista local sí, quién se puede ver expuesto ante el control del gobierno «.
Su experiencia al otro lado del mundo, en un país como Estados Unidos, no era como sé lo esperaba. Ya que al estar influenciados por la cultura estadounidense puede que las distancias no sean tan obvias como en Rusia pero, siempre hay matices.
En relación a la política afirmó » Tuve una butaca de primera fila para ver el paso de Obama a Trump «.
Haciendo alusión a el telediario que se hizo en directo desde Ucrania anteriormente comentado. Nos afirmó que era una novedad de Televisión Española que estaba empezando ha hacer y que en vez de grabar desde el plato como es habitualmente, lo hace desde el sitio del suceso para así tener una visión más cercana y novedosa de la noticia.
Esta idea surge por los 200 años del museo del prado, que llevaron acabo un telediario especial a puerta cerrada desde el museo. Desde entonces lo han seguido haciendo pero, no demasiadas veces ya que solo se hace en ocasiones especiales o en emergencias. «No es solo ponerte a grabar en un sitio. Hay que hacer un diseño de escenario, investigar y preparar las calles donde vas a grabar, para eso hay que tener el ojo bien abierto e instruido «.
Preguntas y Respuestas por parte de los alumnos
P – ¿Qué consejo les darías a los alumnos presentes de periodismo para el futuro?-
R – «Hay que estar al día de las noticias mundiales y saber de todos los ámbitos ya que nunca sabes lo que te tocará informar «–
«En el periodismo no hay un único camino. Hay que tener resistencia y fuerza, aparte de tener una capacidad de adaptación al entrono y la flexibilidad de empaparse del entorno y sobretodo ponerse en el pellejo de los ciudadanos ya que la realidad tiene varios puntos de vista «. «El periodista actual debe tener la cabeza fría y no dejarse llevar por la corriente de los sucesos «, sentenció así en su última respuesta.
De repente, pasamos a la ronda de preguntas. En un mar de manos solo algunos podrían tener la oportunidad de propiciar su pregunta hacia el famoso reportero. En esas preguntas salieron temas como los obstáculos que las tecnologías pueden suponer a los periodistas, como las audiencias se mueven entorno a ciertas noticias. También, salió a relucir la polémica noticia de el joven Álvaro Prieto. Mencionando que lo acontecido es una cadena de errores y que del impacto generado por el suceso, los reporteros no se dieron cuenta de la magnitud de sus acciones.
Con eso se sentencio el final de su visita y con ello la sala se vació no sin antes atender a los alumnos que se le acercaron. Accediendo a dejar un recuerdo para la posteridad en esta facultad.