DANIEL MESONERO GARRIDO  |  Fotografía: Pixabay  |

Desde que comenzó el programa de vacunación frente a COVID-19 han surgido críticas y gran debate sobre el orden de vacunación y la estrategia utilizada. En la primera fase de vacunación se les ha proporcionado dosis a las personas de riesgo mayores de 80 años y al personal sanitario de primera línea.

Lo cierto es que con la llegada de distintas vacunas (Pfizer, Moderna y ahora AstraZeneca) las personas que se vacunarán dependerán de cuál de todas le proporcionará esa dosis. De esta manera, el actual plan de vacunación varía bastante.

En este debate sobre qué grupos hay que vacunar antes se ha colado la CRUE (Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas), que recientemente ha solicitado al Gobierno que se priorice al personal universitario en este nuevo plan de vacunación.

La finalidad que busca CRUE es retomar la normalidad en las universidades cuanto antes. En la primera estrategia de vacunación Sanidad alegó que no era relevante la vacunación de este sector, puesto que se podían evitar contagios mediante la formación online o bimodal. Sin embargo, CRUE asegura que es imprescindible que los docentes impartan las clases desde el aula.

Cuanto antes se vacune al personal universitario, antes volverá la normal actividad universitaria. Además, aumentaría la seguridad en los campus y se protegería el derecho a la educación. El personal universitario se encuentra entre uno de los sectores de población con mayor riesgo de contagio debido a la exposición de sus trabajadores al virus en un lugar cerrado.

En realidad, este no es el único sector en constante exposición al virus. Muchos otros trabajos se encuentran en situaciones parecidas. Un lugar de trabajo en espacio cerrado, continuo contacto con personas, etc. Quizá eso sea uno de los factores que hace que el Gobierno decida no incluirlos en esta segunda fase de vacunación.

Actualmente, la vacunación se está aplicando a grupos del personal sanitario debido a su continuo contacto con positivos y a grupos de personas mayores de 75 años. La cantidad de dosis administradas es de 3,6 millones, lo cual supone que el 7,6% de la población española está vacunada. En nuestro país hay alrededor de 122.000 docentes universitarios.

En el debate también se encuentran otros sectores. Se incluye a los jóvenes como otro sector al que se debería vacunar cuanto antes. Debido a su alta vida social y el constante contacto con otras personas en distintos lugares. Por otro lado, se pide que sigan vacunando de mayor a menor edad para prevenir los fallecimientos de esos grupos sociales vulnerables.

También hay quien pide que se vacune a la población de mediana edad, ya que es una de las que mayor exposición y dependencias tiene, tales como el trabajo o la familia. También hay que tener en cuenta que suelen ser los que más se exponen al virus en los puestos de trabajo. En este grupo se incluye a los sanitarios y al personal universitario.

España no es el único país con discrepancias en la estrategia de vacunación. Cada sector tiene sus prioridades y sus motivos para que se les vacune primero. Lo cierto es que todas las propuestas tienen sentido, pero al final es el Gobierno y los expertos los que deciden quién se vacuna primero.