NOHAYLA TAHIRI EL HAMMOUTI | Fotografía: Pixabay |
La comunidad gitana es la minoría étnica más grande de Europa. Con una población de entre 10 y 12 millones de personas, está presente en casi todos los países europeos. Su dispersión empezó en la Edad Media y ha llegado hasta la actualidad a formar comunidades diversas con dialectos específicos. Los gitanos son uno de los grupos más propensos a sufrir discriminación, han sido perseguidos y sido víctimas del Holocausto. Un estudio llamado Informe Eurobarómetro 263 sobre la Discriminación en la UE muestra que el 77% de los europeos consideran que ser gitano es una desventaja social.
El periodismo es fundamental para el desarrollo de la vida democrática y la lucha contra las injusticias sociales a la vez que se defiende el respeto a los derechos humanos. En muchos países europeos se ha generalizado una imagen negativa de la población gitana, a causa de que una simple representación un tanto tergiversada puede tener impacto sobre la comunidad entera. En el informe de la OSCE/OIDDH se afirma que ‘el buen periodismo que sigue un código ético cuando informa sobre acontecimientos que protagonizan personas gitanas, puede cambiar la percepción pública de estas comunidades’.
Los profesionales de los medios de comunicación cuentan con una serie de recursos, normas y destrices para informar sin perjuicios y prevenir la discriminación contra la población gitana. Uno de los pilares fundamentales es tener unos códigos formales de conducta sumados a una idea clara de las consecuencias de la información estereotipada. Los clichés y los prejuicios hacia esta etnia provienen por el desconocimiento de la realidad, lo que provoca un desinformación y discriminación. En España se señaliza a los medios de comunicación como principales culpables de la distinción que sufre la etnia. Desde hace siglos, este pueblo solo sale en los medios cuando se informa sobre temas como la delincuencia, asesinatos, drogas, agresiones, o prisiones.
Algunas de las pautas que se emplean habitualmente en el periodismo para informar correctamente sobre la población gitana, son algunas como usar la terminología adecuada, evitar el uso de palabras que tienen connotaciones negativas o la difusión de información inexacta, contextualizar los hechos y hacer uso de documentos públicos veraces. También es necesario mejorar artículos discriminatorios o cuidar el uso de las imágenes. No hay que olvidar que la comunidad gitana es una más y forma parte de este mundo enriquecido, gracias a la gran diversidad cultural que existe. Convivir con la etnia gitana, en vez de verlo como una amenaza, se debería considerar una ventaja.