ANHOA H. CELESTINO | Fotografía: Ainhoa de la Huerga |
En medio de la actual crisis por la pandemia, el clima político está cada vez más crispado. El auge de los extremismos en la política de Europa y España coincide con la situación de emergencia generada por el COVID-19. Las redes sociales y la viralización de las opiniones más extremistas han sacado a relucir la polarización en las ideologías. La juventud está expuesta e influenciada por estos mensajes.
Si bien, según una encuesta del Injuve, en 2017 solo un 11% de los encuestados entre los 15 y los 29 años se interesaba mucho por la política, un 26% afirmó que bastante y un 62% poco o nada implicados en este ámbito.
En contraposición de esta desvinculación de la juventud, se ha creado a nivel europeo una organización apolítica y apartidista con la vocación de educar e implicar a la juventud en la política. Esta iniciativa se llama Parlamento Europeo de Jóvenes, en inglés European Youth Parliament (EYP). Esta organización anima a la integración europea en el ámbito regional, nacional e internacional. Trata de conseguir mayor participación y proactividad por parte de este segmento poblacional.
A nivel regional, existen delegaciones en España en las que a través de sesiones los jóvenes pueden debatir sobre movimientos sociales, como los derechos de la comunidad LGTB o el feminismo. A su vez, debaten sobre el futuro de los mercados en la nueva revolución digital que ha provocado grandes cambios político-económicos en nuestra realidad.
También han tenido lugar sesiones nacionales a lo largo de diversos años en diversas ciudades españoles. La última de estas se celebró en Barcelona el pasado 2020, siendo la XV celebrada para escoger a los representantes para las sesiones que se celebran a nivel internacional.
Estas sesiones europeas se celebran en Berlín, donde tiene sede este Parlamento Europeo de los Jóvenes. El principal objetivo de esta organización es la cooperación europea de la juventud y el intercambio intercultural de opiniones sobre temas políticos y sociales, tales como los movimientos y las luchas por los derechos humanos.
A través de estos intercambios, las generaciones del mañana han conseguido un espacio abierto y de fórum en el que debatir sobre el futuro de Europa. También consiguen que la unión en pro de la integración de la juventud dentro de la comunidad europea.
El principal objetivo de estas iniciativas es educar a los jóvenes en una mirada crítica y consistente sobre la política. En este clima de polarización y desinterés político, resulta fundamental conseguir que las generaciones futuras que elegirán y serán los líderes del mañana no caigan en el populismo y el sensacionalismo.
Por medio del pensamiento crítico y el debate, la juventud podrá establecer un clima de cooperación internacional para generar interés por la política en una generación que parece cada vez más desencantada con la clase dirigente. Es importante para el futuro conseguir la integración de los más jóvenes, especialmente en el momento de globalización actual, dónde todo está interconectado.
Las decisiones internacionales afectan a las nacionales y, por ende, a las regionales. Es imprescindible que ante la desinformación y el desinterés, se eduque a la población para conseguir políticas que favorezcan la unión y los derechos humanos fundamentales.
