Ainara Álvarez González | Fotografía: Pixabay |
La llegada y el crecimiento de las redes sociales ha traído consigo desafíos importantes en cuanto a privacidad, seguridad y responsabilidad. En España, la legislación ha tenido que adaptarse a esta nueva realidad, con el objetivo de proteger a los usuarios y promover un entorno digital seguro y responsable.
El Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), que se aplica a toda la Unión Europea, establece normas estrictas sobre la recopilación y tratamiento de datos personales. Las redes sociales deben obtener un consentimiento explícito de los usuarios antes de procesar sus datos, especificando cómo se utilizarán y almacenarán.
En España, el RGPD llevó a cambiar la Ley Orgánica de Protección de Datos de Carácter Personal (LOPD) por la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales (LOPDGDD). Esta ley no solo protege los datos de los usuarios, sino que también refuerza derechos, como el derecho al olvido, permitiendo a los usuarios solicitar la eliminación de sus datos personales en determinadas circunstancias.
Ademas, la UE ha impulsado la Ley de Servicios Digitales (DSA), una normativa para regular el funcionamiento de plataformas digitales y garantizar un entorno en linea más seguro y equitativo.
Otro aspecto relevante en la legislación es la responsabilidad del contenido compartido en las redes sociales. La Ley de Servicio de la Sociedad Intelectual (LSSI), establece las obligaciones de los proveedores de internet, incluidos medios sociales, en cuanto a la moderación y eliminación de contenidos ilegales. Esto incluye la obligación de actuar con rapidez ante denuncias de contenido que infrinjan la ley, como el ciberacoso o la difusión de discursos de odio.
El Código Penal aborda delitos relacionados con el uso de las redes, permitiendo a las autoridades actuar contra comportamientos ilícitos que se produzcan en estas plataformas.
La Ley de Propiedad Intelectual en España también se aplica a las redes sociales, protegiendo los derechos de autor en el entorno digital. Las plataformas deben asegurarse de que no se va a vulnerar los derechos de propiedad intelectual al permitir que los usuarios compartan contenido.
Con el auge de las redes sociales y la influencia de los creadores de contenido sobre sus seguidores, se ha implementado un reglamento para regular su actividad en relación con la protección de menores y la difusión de contenidos publicitarios. Esto incluye la obligación de que la publicidad sea claramente identificable y cumpla con estándares de veracidad, asimismo, prohibe la publicidad de tabaco y medicamentos. Además , será necesario clasificar el contenido por edades.
Recientemente, se ha intensificado la regulación de desinformación en redes sociales, especialmente durante periodos electorales. Las autoridades buscan garantizar que los usuarios tengan acceso a información veraz y frenar la propagación de noticias falsas. Además, el Congreso ha debatido en los últimos días una Proposición No de Ley que recomienda que los menores no utilicen sus móviles, internet o redes sociales hasta los 16 años.