ALBA MARTÍNEZ DEL CASTILLO | Fotografía: Ainhoa de la Huerga |
En la actualidad, no hay ni una persona que no desee que acabe el COVID-19. Según explica el ministro de sanidad Salvador Illa, el pronóstico que tiene Sanidad sobre la vacunación contra la COVID positivo. Esto se debe al gran aumento en número de los sanitarios que han participado en la campaña de la vacuna de la gripe, que ha subido un 40%. Además, se han vacunado, en total, más del 80% de los sanitarios, a pesar de sus dudas sobre estas vacunas.
El ministro también ha defendido que la vacuna es segura, eficaz y va a salvar muchas vidas, para tranquilizar a ese tercio de la población que está en contra de ella o duda si ponérsela. Además, el principal objetivo de esta campaña de vacunación contra el COVID-19 es que la mitad de los ciudadanos estén vacunados en verano. Para ello, España va a comprar más de 73 millones de dosis, pero la recibirán la mitad de personas que el número de dosis adquirida puesto que se requieren dos dosis por persona.
Para concienciar sobre los daños que está produciendo esta enfermedad, el Gobierno ha presentado una campaña publicitaria. El objetivo final es avisar a la población de las restricciones que deben cumplir en las reuniones de Navidad. El vídeo muestra a una familia que no puede reunirse al completo, pero prefiere respetar todas las normas y no poner en peligro a nadie. Su lema es ‘cuidarnos, el mejor regalo de esta Navidad’.
Estas medidas suponen el cierre de las comunidades del 23 de diciembre al 6 de enero. Solo se podrá entrar y salir para visitar a ‘familiares y allegados’. En las reuniones de Navidad, el máximo es de diez personas y el toque de queda se amplia hasta las 01:30 horas.
Para complacer las peticiones de Madrid y Cataluña, Illa también ha pedido que se habiliten las farmacias para realizar en ellas test de coronavirus. Aun así, hay que tener cuidado, ya que dar positivo o negativo con estos test no sirve de nada si no se acompaña por una PCR, según Pilar Aparicio, directora general de Salud Pública. Además, Salvador Illa también ha dividido a la población en quince grupos para ordenar el acceso a la vacuna siguiendo tres criterios: riesgo de morbilidad, riesgo de exposición y riesgo de impacto socioeconómico. Estos grupos son los siguientes:
- Personal sanitario y sociosanitario.
- Personas residentes en centros de mayores.
- Población general mayor de 64 años.
- Personas con gran discapacidad.
- Población con condiciones de riesgo.
- Personas que viven o trabajan en entornos cerrados.
- Personas pertenecientes a poblaciones vulnerables por su situación socioeconómica.
- Personas con trabajos esenciales.
- Personal docente.
- Población infantil.
- Población adolescente y joven.
- Conjunto de la población adulta.
- Población especialmente afectada por la posibilidad de rebrotes.
- Embarazadas y madres lactantes.
- Población inmunizada frente al SARS-CoV-2.
Según el ministro, hay que confiar en la garantía europea y en la regulación, ya que es una de las más estrictas en cuanto a vacunación. ‘Cuando la agencia europea autorice la vacuna, querrá decir que son seguras y eficaces’, ha señalado Illa.