PABLO NICOLÁS CABRERA PÉREZ | Fotografía: PIXABAY |
Cada año aproximadamente 120 estudiantes de todas las edades y perfiles van a entrar en la carrera de periodismo en la UVA. Muchos de ellos entran al grado motivados por su pasión, los deportes y el periodismo deportivo. La situación en la que se encuentran los medios y el sector profesional ha cambiado notablemente, es necesario cuestionarlo de otra forma. ¿Qué salidas tiene el periodismo deportivo? ¿Es difícil conseguir dedicarse a ello en los medios? ¿Existen otras alternativas?
El periodismo deportivo se dedica a la información y a la comunicación deportiva dentro de los medios, aunque se tiende a generalizar a la prensa deportiva con periódicos sobre fútbol o basket, ésta trata todo evento de interés relacionado al mundo del deporte en todos los canales posibles.
El periodismo deportivo es capaz de mover masas, quienes lo consumen son aficionados a cierta entidad, club o persona. En la mayoría de los casos, el consumidor medio es un forofo o gran interesado. Es por ello que muchos de los diarios tradicionales tratan la información de forma diferente en comparación con los contenidos informativos independientes. Los cuales han podido llegar gracias a las nuevas tecnologías. El problema es que la profesión se encuentra en una crisis nunca vista; muchas de las empresas comunicativas ponen por delante la rentabilidad a la calidad de sus productos informativos.
El periodismo ha evolucionado, hoy en día el periodismo deportivo es más amplio, existe un mayor número de consumidores, una mayor conexión hacia el mundo deportivo y se han creado nuevos conceptos como es el de los E- Sports. Eso hace que las salidas sean cada vez mayores, por decirlo de otra forma, hay más sobre lo que redactar dentro del deporte. Por otro lado, que exista un número mayor de noticias no quiere decir que la situación del periodista sea la mejor.
Este problema se traslada hacia todos los ámbitos del periodismo, según el informe anual de la profesión periodística de la APM en 2018 el 61% de los periodistas dedican más de 40 horas semanales y el 71% siente que sus condiciones laborales han empeorado. Dentro del terreno concreto del deporte, el periodismo deportivo se encuentra en parte «colapsado», ya no solo por periodistas, sino que además personas vinculadas al mundo del deporte como ex-deportistas o ex-árbitros hacen parte del trabajo que el especializado no hace, un ejemplo es el comentarista y exfutbolista Michael Robinson, que incluso fue galardonado en 2017 con el XII Premio Internacional de Periodismo Vázquez Montalbán.
El camino a seguir lo muestran los propios profesionales, M.ª Ángeles San Martín Pascal afirmó en uno de sus artículos que a día de hoy vivimos un «enorme cambio en las rutinas de los profesionales de la información y de la forma con que éstos se están comunicando», en esa misma publicación también aparece que el 37% de los periodistas tradicionales participan en Twitter y el 39% manifiesta escribir para algún blog como parte de su deber profesional. En muchos casos, la alternativa es adaptarse, muchos ya lo han hecho en la plataforma YouTube como el propio Julio Maldonado con Mundo Maldini o los expertos en Baloncesto Sergio Andrés y José Saenz con su proyecto Drafteados.
Los propios redactores deportivos trabajan desde un ámbito vocacional. Pero necesario que por desgracia desde las grandes empresas y medios, no se está tratando de la forma correcta.