LAURA VEGA GONZÁLEZ | Fotografía: Pinterest |
Nueva York, 1998, cabalgata de Acción de Gracias. Kiera Templeton, desaparece entre la multitud. Tras una búsqueda frenética por toda la ciudad, alguien encuentra unos mechones de pelo junto a la ropa que llevaba puesta la pequeña.
En 2003, el día que Kiera habría cumplido ocho años, sus padres, Aaron y Grace Templeton, reciben en casa un extraño paquete: una cinta VHS con la grabación de un minuto de Kiera jugando en una habitación desconocida.
Javier Castillo es un autor español de thrillers, novelas de misterio y policíacas, que se ha convertido en todo un fenómeno literario y uno de los más leídos de este género. Su primera novela, El día que se perdió la cordura, se convirtió en bestseller y alcanzó las 200.000 ventas en un año.
Si estás en un bloqueo lector y necesitas volver a reengancharte a la lectura, este libro es una muy buena elección para conseguirlo. Porque gracias al estilo de Javier Castillo, con sus capítulos cortos y los saltos temporales continuos que te dejan con la intriga y la tensión, siempre quieres seguir leyendo para saber más.
A pesar de ser una historia menos sangrienta, violenta y explícita, también con algo menos de suspense que otras de sus novelas, sigue siendo igual de buena. Pero esto no la hace menos dura de leer, al tratarse de la desaparición de una niña y el sufrimiento de los padres desesperados por recuperarla.
La adaptación de la novela en Netflix se convirtió en una de las más vistas en cuanto se estrenó. En solo una semana alcanzó más de 31 millones de horas visualizadas.
Algo a destacar también es la profundidad de los personajes y de sus vidas, en las que no falta el drama. Detrás de cada uno se esconde una historia oscura y un pasado que ha dejado una huella y los ha convertido en lo que son ahora. Tanto en la periodista Miren Triggs, como en los secuestradores de la niña.
Además Javier Castillo, a través del personaje de Miren Triggs, una joven periodista de carácter obstinado, que hace lo imposible por encontrar a la pequeña Kiera Templeton y que tiene un enorme peso en la trama, intenta mostrar, teniendo en cuenta la ficción de la historia, una realidad bastante cruda de lo que conlleva todo el mundo del periodismo de investigación, el trabajo y esfuerzo que hay detrás. Así como las dificultades que en muchas ocasiones entorpecen el camino de los profesionales para llegar a la verdad y poder contarla. Una preocupación que el autor, a pesar de no formar parte del sector periodístico, plasma también en sus redes sociales.
Por lo que, si te interesa el mundo del periodismo, lo estudias o de alguna forma estás vinculado a él, tienes una razón más para leerlo.
Como conclusión final decir que si empiezas esta novela no podrás dejarla a la mitad, ya que no puedes saber qué va a ser de los personajes hasta el final del libro. Porque aunque Javier Castillo intente ir dando pistas y pretenda que construyas un puzle del misterio en tu cabeza, es muy difícil, por no decir imposible, predecir el desenlace de la búsqueda incansable de Kiera.