ALEJANDRO DÍEZ GARCÍA | Fotografía: Locarno Press Materials
Toxic, de la directora lituana Saulè Bliuvaitè (1994), llega a la SEMINCI en su 69ª edición. Se ha estrenado a nivel nacional en la sección «Punto de Encuentro» tras haber sido la ganadora del Leopardo de Oro y del Premio a la mejor ópera prima en el Festival Internacional de Cine de Locarno.
Toxic es el primer largometraje de su directora, Saulè Bliuvaitè, que ya había dirigido varios cortometrajes como The Contest o Limousine. Bliuvaitè estudió Dirección en la Academia Lituana de Música y Teatro, en Vilna, donde se graduó en 2018.
La directora se inspiró en su propia experiencia y la de la gente a su alrededor, además de en el documental Girl Model, de 2011, para escribir su opera prima. Toxic es un drama sobre la autopercepción del cuerpo adolescente, la influencia del entorno en sus habitantes y la voluntad de escapar. Las protagonistas de la película, de 13 años, se apuntan a una escuela de modelaje que promete sacarlas de su pueblo desolado. Para ello, tendrán que llevar sus cuerpos hasta el límite a través de los desórdenes alimenticios y conductas extremas, propiciadas por dicha agencia, que aumenta la distorsión en la autopercepción de las propias adolescentes.
Según la directora, la película no trata de ser una pieza educativa, sino un reflejo de la situación de incontables adolescentes que se enfrentan, en muchos casos sin herramientas, a un mundo hostil y cimentado en los cánones de belleza poco realistas. Bliuvaitè espera que el público joven se identifique con la película, o al menos la sientan cercana, «creo que ese es el objetivo al hacer una película», dice la directora.
Toxic es una película inteligente, que implica al espectador en las -muchas veces erróneas- decisiones de sus protagonistas, despertando una profunda empatía. Hace un retrato casi amable de la relación entre las alumnas de la escuela de modelo, que no compiten entre ellas de la misma forma que se nos ha mostrado en numerosas piezas de ficción, sino que tratan de avanzar individualmente, con la huida del pueblo como objetivo común.