ANA GIL ARIAS | Fotografía: Inés Centeno |
La recién graduada en Estudios Clásicos, Silvia Gutiérrez, acaba de publicar un libro titulado Aire en vertical. Este es una recopilación de poemas escritos de su puño y letra en los que va tocando varios temas, pero todos tienen el amor como hilo conductor.
Pregunta: ¿Cómo estás llevando la situación?
Respuesta: Yo llevo soñando con publicar un libro toda mi vida. Veo el resultado, toco el libro, y me cuesta mucho creer lo que está pasando. Me hace mucha ilusión, estoy muy feliz y el libro se está vendiendo muy bien, pero todavía me cuesta mucho asimilar que sea mío.
P: ¿Qué te llevó a escribirlo?
R: Empecé a escribir el libro durante la cuarentena. Poco antes había vivido una situación muy delicada a nivel emocional, y para mí ese tiempo que duró el confinamiento fue un periodo de reflexión. Me apeteció transformar todo lo que yo sentía en poemas, siempre me he expresado así. Es cierto que, a lo largo de todo el proceso, el poemario fue cambiando, no se parece en nada al original. A pesar de que lo empecé en cuarentena, no lo terminé hasta el año pasado, cuando decidí que era así como quería presentarlo.
P: La mayoría de la gente que escribe se siente más cómoda haciéndolo en prosa. ¿Por qué tú decidiste hacerlo en verso?
R: Mis amigos me han preguntado esto muchas veces (risas). Creo que no hay un motivo concreto. Siempre me han gustado mucho los poemas, de pequeña tenía libros de poesías para niños en casa. Además, me gusta mucho la música y llevo escuchando a cantautores desde pequeña. Me parece que la poesía, dentro de la literatura, es lo que más se parece a la música. Aunque he de decir que también tuve mi época de prosista, escribiendo reflexiones de pequeña (risas).
P: ¿Con qué poeta te sientes más identificada?
R: Uf…Por ejemplo, me gusta mucho el estilo de Sylvia Plath y el de Aníbal Núñez.
P: ¿Tus poemas son autobiográficos? Es decir, ¿están inspirados en experiencias que has vivido tú?
R: Soy un poco egocéntrica (risas). Creo que todos los poemas me miran a mí en cierta manera. Hay algunos que son experiencias directas mías, como el que se titula La Rosa. En los que tienen nombre de mujer (Ofelia, Lucrecia, Penélope…) he tratado, metafóricamente, de relacionarlos con algún suceso que me haya ocurrido. Yo creo que se podría decir que este poemario es como mi diario personal.
P: A la hora de escribir, ¿en qué poetas te inspiras?
R: Me gusta mucho la literatura del siglo XX, autores como Jaime Gil de Biedma, Clara Janés…Aunque creo que también hay huellas de los escritores grecolatinos. Soy un poco radical (risas). Creo que, si solo te obcecas con un tipo de poesía determinada, te cierras muchas posibilidades.
P: Te llaman Endecasilvia, ¿por qué?
R: (Risas).Todo empezó en Poetry Slam Valladolid, en el que llevo participando un año. Desde siempre he escrito en endecasílabos y nadie se había dado cuenta nunca. Un día, un amigo me dijo que se me daba muy bien escribir en endecasílabos, y el resto del grupo estuvo de acuerdo. Y ya empezaron a hacer juegos de palabras y salió endecasilvia.
P: Si tuvieras que definir tu libro en una sola palabra, ¿cuál sería?
R: Aprendizaje. El libro empieza invocando un poco a mi yo preadolescente y a lo que pensaba del amor, y acaba explicando qué pienso a día de hoy que es el amor. Todo lo que voy narrando es mi proceso de aprendizaje, que es mío, pero también es el de muchas. Utilizo el femenino porque creo que, lo que me ha ocurrido a mí , es algo que nos ha pasado, creo, más a las mujeres. El hecho de leer libros o ver películas que en realidad muestran relaciones tóxicas y creer que eso es amor. No tienes referentes de relaciones sanas hasta que eres un poco más mayor.
P: ¿Y qué es para ti el amor?
R: Antes pesaba que el amor era una especie de molde en el que una pareja tenía que encajar. Que había que aceptar todo lo que viniera porque el amor era más fuerte. Ahora he visto que no, que el amor no es una especie de ser todopoderoso y que hay cosas que no se pueden aceptar. Como dice uno de mis poemas, ‘es amor el amor al darnos paz’.
P: ¿Cuál es tu poema favorito de todos los de tu libro?
R: Lucrecia. Su historia es un mito romano menos conocido que otros, pero me siento muy identificada con ella.
P: Hay muchos amantes de la literatura a los que también les encanta escribir, pero no se atreven a enseñar sus relatos a otras personas. ¿Qué les dirías tú a todas aquellas personas que tienen miedo de mostrar su trabajo?
R: Lo primero que les diría es que es normal tener miedo o vergüenza. Al fin y al cabo, escribir es, en cierta manera, como desnudarse. Pero creo que, si de verdad sientes la necesidad de expresar lo que sientes, tienes que obligarte un poco a ello. Hoy en día, con las redes sociales, es muy fácil dejar ver pequeños textos, poemas o reflexiones. O leérselos a amigos de confianza. Hay que buscar un punto en el que te sientas cómodo o cómoda para expresarte y, una vez llegado a ese punto, ver si quieres publicar, crear un blog, si simplemente quieres recitar en micros abiertos…Porque lo que no sacas fuera se te enquista dentro.