LUIS MIGUEL GALLEGO DE LA FUENTE | Fotografía: Mayela del Castro |
Una actividad divertida y bastante seria. Así es el taller ‘Masculinidades. Los hombres y la igualdad: resistencias y retos’. Abrió con la explicación del objetivo de la actividad: la concienciación de las personas para lograr la igualdad de sexos.
El taller empezó a las 16:00 horas de un 15 de mayo y a las 16:10 horas se presentó al coordinador de la actividad, Josetxu Riviere Aranda, miembro del programa Isondus del Emakunde (instituto vasco de la mujer). Después de su presentación, pasó el turno a los participantes, personas de índole bastante diversa. El taller sigue una metodología participativa, así que hubo muchos debates y ejercicios.

A las 16:30 horas comenzó la segunda parte del taller, la cual estuvo más centrada en una crítica a la sociedad actual. Se trataron los diferentes problemas que están presentes en la comunidad respecto a la igualdad de sexos. Desde la exclusión de ciertos grupos, como pueden ser las personas transgénero, hasta los estereotipos que afectan a las mujeres en los diferentes ámbitos de su vida. Lo hizo mostrando diferentes ejemplos de cómo la sociedad trata despectivamente a los que son diferentes al estereotipo. Noticias homófobas y un video de la identidad de género que explica los fallos en la actualidad fueron los mayores argumentos.
Más tarde, sobre las 16:55 horas, se abrió un debate entre el público y el coordinador sobre cómo veían esta situación. Algo que motivó un debate animado en el que llegaron a conclusiones bastante racionales. Después, desde las 17:10, el taller consistió en plantear soluciones a los problemas planteados en la primera hora. Riviere propuso remedios y enseñó qué avances ha habido para incluir a estos grupos, por ejemplo, dejar de considerar a la transexualidad una enfermedad o impartir cursos de concienciación. Además, mostró cómo podemos echar una mano a la mujer para igualar las cosas entre sexos en los diferentes medios de su entorno. Para cerrar esta primera parte del taller, se explicó la definición de igualdad para evitar un mal uso.

Durante el descanso para que los participantes se conocieran mejor, aprovecharon el tiempo para hablar sobre los temas impartidos. A las 18:15 horas comenzó la segunda parte. Más centrada en los diferentes ámbitos de la masculinidad. La actividad prosiguió con agitación, ya que hubo un ejercicio donde los hombres se tenían que puntuar a ellos mismos sobre su hombría. Todo ello como preparativo para discutir sobre qué significaba la masculinidad. Lo primero que se abordó fue la masculinidad diversa, que significa que no todos los hombres son iguales, así que, no es correcto puntuarlos con una metodología semejante sin mirar antes distintos factores. También se relacionó todo esto con los diferentes tipos de sexualidad y se recalcó que no afectaba a la masculinidad de una persona.
A las 18:45 horas se decidió relacionar todo lo visto hasta el momento y Riviere propuso otra actividad la cual trataba de enumerar las ventajas que tenía un sexo frente al otro y decir soluciones. La prueba como todas las demás fue un éxito y se obtuvieron bastantes resultados e hizo pensar a los participantes. Como último paso, a las 19:10 horas, se habló de los cuidados y el riesgo de las masculinidades. En este punto entraba toda esa masculinidad tóxica que existe en los tiempos actuales y, asimismo, los diferentes estereotipos que afectan al género masculino. Un taller que aportó mucho a sus asistentes, quienes lo abandonaron un poco más deconstruidos.