ALBA CALLE PÉREZ  |  Fotografía: Civitatis Valladolid  |

Valladolid es una ciudad llena de cultura. Está llena de lugares de interés turístico de distintas épocas. Entre ellos se encuentran museos, iglesias y diversos edificios históricos. Se necesitarían varios días para visitar todo lo que la ciudad puede ofrecer, por no hablar de las joyas arquitectónicas menos conocidas que se pueden encontrar en los pueblos cercanos a Valladolid.

Letrero de Valladolid

Aunque son muchas las páginas web y las guías que ofrecen itinerarios y rutas para turistas, en pocas aparecen mencionadas las criptas y las ruinas de Valladolid. Una cripta es ‘un espacio arquitectónico subterráneo en que se enterraba a los fallecidos’ y aunque alrededor del mundo existen criptas muy famosas como la del castillo de Durham en Inglaterra, la de St. Edmund Hall en Oxford o la de San Antolín de Palencia, nadie habría imaginado que el subsuelo de Valladolid escondía algo así.

Cripta de San Antolín

Las criptas y ruinas de la ciudad se pueden visitar en grupos de 6 personas, un aforo limitado debido a que los lugares son vulnerables a la presencia humana y a su desgaste. Así mismo, la situación del COVID-19 obliga a los asistentes a llevar mascarilla y a guardar la distancia de seguridad requerida. La duración de la visita es de 2 horas y el precio de la entrada son 6 euros de forma general, a pesar de que los niños de entre 5 y 14 años y las personas mayores de 65 años pagan un euro menos. Los menores de 5 años entran gratis. El guía del recorrido está incluido en el precio y los tours solamente están disponibles en español.

El punto de partida de los intrépidos participantes de la visita será la iglesia de El Santísimo Salvador. Una vez allí, es el momento de bajar a las profundidades de una cripta que esconde muchas historias. Entre ellas, relatos de camposantos vallisoletanos que pondrán los pelos de punta. La ruta por el subsuelo continúa por el Monasterio de San Benito. Los restos de la fortificación medieval de Alcazarejo serán los protagonistas del recorrido. Se trata de una fortificación, que sirvió para defender la ciudad en el siglo XIII. Los visitantes volverán a pisar las calles para recorrer las rúas más antiguas del centro histórico. Un paseo que mostrará la evolución de la ciudad. En definitiva, un recorrido entre calaveras, huesos y sepulturas… para resucitar la historia de Valladolid.

Iglesia El Santísimo Salvador

Se recomienda reservar con antelación las entradas en la página web oficial a los futuros visitantes para que se pueda garantizar la disponibilidad, aunque las plazas están llenas hasta junio debido a la alta demanda de las visitas. A pesar de ello, es una actividad idónea para conocer los secretos de una Valladolid que no todos conocen.