MARÍA ARROYO CANO | Fotografía: World Animal Protection |
La World Animal Protection, sociedad mundial que protege los derechos de los animales, promueve el Día Mundial de los Animales con el objetivo de concienciar sobre la extinción de especies protegidas. Mascotas y dueños celebran la fecha como conmemoración de San Francisco de Asís, patrón de los animales y los ecologistas.
El Día Mundial de los Animales aterriza en todo el planeta como iniciativa de concienciación sobre la conservación de las especies protegidas y el abandono de mascotas en zonas urbanas. La Fundación Derecho Animal, Ética y Ciencia (Liga Internacional de los derechos de los animales en aquella época) proclamó una declaración de 14 artículos sobre los derechos de los animales. De este modo, nació la Declaración universal de los derechos del animal en octubre de 1978, en una sala de la sede de la UNESCO en París. Sin embargo, la ONU no tiene relación con la declaración, a diferencia de lo que se ha divulgado. Lo que es cierto es que ha incluido los derechos de los animales en sus objetivos para 2030.
La iniciativa pretende también recalcar la preferencia de adoptar ante la posibilidad de comprar una mascota. La importancia de adoptar radica en ofrecer una segunda oportunidad a aquellos animales que por motivos diversos acaban en protectoras o no pueden ser atendidos por sus respectivos dueños.
ONGs como World Animal Protection o WWF se unen a la causa benéfica de luchar por el bienestar de todas las especies. Sus objetivos son comunes: la protección de animales, la concienciación y, además, en el caso de WWF, la conservación de la vida salvaje. El trabajo de las organizaciones logra que, además de hacer presente la necesidad de un cambio, se promuevan valores de cooperación entre la sociedad para lograr un cambio mayor. Un cambio que se consigue a través de iniciativas como recogidas de firmas o servicios de voluntariado que permiten una involucración mayor en la causa.
Como figura representativa de estos seres vivos se alza San Francisco de Asís, por su consideración de iguales a animales y seres humanos desde 1980. Desde entonces y en estas fechas, miles de católicos se congregan para recibir la llamada Bendición de los Animales.