SANDRA SORIA ALONSO | Fotografía: Sandra Soria |
Javier López Ferreras, un joven estudiante de Periodismo por la UVa, ha dado positivo en coronavirus. Él ha vivido la enfermedad entre las cuatro paredes de su habitación con cierta incertidumbre y preocupación durante un momento convulso para la pandemia. Esta segunda ola dispara las cifras de contagiados por COVID-19. Por ese motivo, es vital ‘poner rostro a los casos’, tal y como dice López.
Pregunta: ¿Dónde te contagiaste? ¿Llevabas mascarilla?
Respuesta: Sí, llevaba mascarilla. Sospecho que como más personas de mi entorno que han dado positivo van a la misma autoescuela que yo, ha sido el lugar donde me he contagiado.
Además, allí todos los alumnos llevábamos mascarillas. Sin embargo, uno de los profesores se la quitaba para hablar en clase. El límite de aforo tampoco se cumplía a rajatabla y las distancias entre los compañeros no eran de un metro y medio. Yo creo que han intentado abarcar más de lo que podían por todo lo que han perdido estos meses y después han sufrido el efecto contrario por ello.
P: ¿Qué síntomas has tenido?
R: Durante los dos primeros días sentía mareos y dolores de cabeza. También me notaba más cansado de lo habitual y con dolores musculares. No era como otras veces que he tenido catarro. Me encontraba agarrotado. Después de un par de días solo tuve una tos fuerte, pero el resto de los síntomas remitieron.
P: ¿Qué medidas tomaste en casa para proteger a tus compañeros de piso cuando te comunicaron el resultado de la PCR?
R: Me lo dijeron cuando estaba en el salón con ellos. Entonces eché a correr hacia mi habitación. Acto seguido también les llamaron por teléfono a ellos. Además, las autoridades sanitarias me indicaron que tenía que estar con mascarilla cada vez que saliera de mi cuarto, lavar la ropa a sesenta grados, ventilar muy bien todas las salas y desinfectar el baño cuando lo utilizara. También, me recomendaron que tuviera platos y cubiertos reservados exclusivamente para mí.
P: ¿Cuánto tiempo llevas confinado y qué ha sido lo más difícil de sobrellevar estos días?
R: Llevo unos 16 días confinado. Lo que más he extrañado obviamente ha sido no poder salir a la calle y también las pequeñas cosas de casa. Por ejemplo, no poder cocinar algo cuando tenía hambre. Dependía de que me lo hiciera otra persona. De la comida se encargaban mis compañeros. Yo sacaba una silla y dejaban ahí mi plato. Cuando yo lo recogía se alejaban unos metros y lo metía dentro de mi cuarto.
P: ¿Cuándo tienes que hacerte la segunda PCR?
R: No me han dicho nada de otra PCR. Se ve que, si alguien da negativo y ha estado expuesto al virus, tiene que hacerse una segunda PCR. Por el contrario, si das positivo en coronavirus no tienes que hacerte otra, según me han dicho. A partir de los diez días apenas existe posibilidad de que contagies a alguien. Sin embargo, tienes que seguir manteniendo la distancia. Eso sí, te recomiendan que te hagas una prueba de anticuerpos. En mi caso el lunes voy a hacérmela.
Actualmente, a los positivos por COVID-19 se les exige una cuarentena de 15 días, sin necesidad de realizar un segundo PCR. Aún así, este periodo de confinamiento puede acortarse a 10 días si el paciente se realiza la segunda prueba, según el Ministerio de Sanidad.
P: ¿Crees que haría falta una labor de concienciación mayor por parte de los medios de comunicación?
R: Estaría muy bien que hubiera una tarea de concienciación no solo por parte de los medios, sino también por parte de Sanidad y del Gobierno. Inciden en la mascarilla y las medidas básicas. Sin embargo, yo hasta que no me han llamado tampoco conocía más allá de eso. Si la gente supiese el tipo de medidas que tiene que adoptar, se solventarían algunas dudas, distinguirían mejor las fake news y tendrían más claro qué hay que hacer y qué no.
P: ¿Crees qué te has adaptado de nuevo al modelo online de la Universidad?
R: Al tener un ordenador disponible en mi habitación, no he tenido mucho problema. Ha sido como una semana online en el sistema bimodal que tenemos en el Grado de Periodismo. Además, me ha resultado muy cómodo disponer de la plataforma online y que este año no fuera totalmente presencial.
P: ¿Cómo consideras, en tu caso, que ha sido la gestión sanitaria?
R: Yo soy de León. Entonces, para pedir el traslado de un centro de salud a otro tienes que hacer muchas llamadas para saber cuál es el que te corresponde. Es un jaleo. Además, he tenido que ser yo quién llame e insista en numerosas ocasiones para solicitar información, porque no se ponían en contacto conmigo. Tampoco me atendían en el número específico para atención por coronavirus, me remitían directamente a urgencias.
La sensación que tengo es que estás en el limbo y nadie te atiende bien. Además, a mis compañeros de piso tardaron varios días en hacerles la PCR. Por suerte dieron negativo. No cumplían con los tiempos a la hora de realizar las llamadas de seguimiento. Sé que la situación es difícil y es complicado gestionarla, pero el tema de los traslados intentaría modificarlo. Creo que no se ha adaptado a la situación actual. Sin duda, procuraría agilizar la burocracia.
P: ¿Cuál es tu mayor miedo?
R: Mi mayor miedo no es tanto por mí, sino por mi familia. Un familiar ha muerto de coronavirus y no quisiera que esto volviera a ocurrir.
P: ¿Qué mensaje lanzarías a todas aquellas personas que niegan la existencia del virus?
R: Yo lo he pasado, puedo decir que existe. Es algo que está pasando de verdad. Hay que poner rostro a los casos, en lugar de dar tantas y tantas cifras. Hace falta más empatía.
