NOELIA LÓPEZ GÓMEZ | Fotografía: Monoloco Fest
El 14 de marzo de 2020 se decretó el Estado de Alarma en España. Los ciudadanos tendrían que permanecer en sus domicilios hasta nuevo aviso. Unos días antes del confinamiento, el Ultra Music Festival de Miami fue el primer evento musical de gran magnitud cancelado por el COVID-19. A partir de ese momento, cientos de festivales, fiestas y conciertos se vieron obligados a cerrar sus puertas, sin tener idea de cuándo volverían a la carga.
La pandemia supuso un antes y un después para el sector festivalero en España. Tras los meses de desesperanza, la gente quería salir de nuevo. Ese gran ánimo se vio reflejado en el crecimiento exponencial de asistentes en este tipo de eventos. 24,6 millones de personas asistieron a conciertos de música popular en vivo en España en 2022, primer año sin restricciones sanitarias. Esto significó una gran noticia comparado con los 7,38 millones que lo hicieron en 2020, según la Sociedad General de Autores y Editores. Además, según la Asociación de Promotores Musicales, la industria se recuperó económicamente en un 200% comparado con el 2021.
En este contexto positivo para la industria festivalera, se sitúan dos estudiantes de la Universidad de León: Diego Bajo y Héctor Herrero. En su caso, una de las cosas que más les afectó fue en la vida universitaria. Antes del COVID-19, se organizaban las espichas leonesas de cada facultad. Eran fiestas universitarias que se celebraban en cada campus. Con la pandemia se prohibieron y no se volvió a hablar de retomar esa gran tradición cuando se calmó la situación sanitaria. En 2022, ese año de esperanza e ilusión, a estos dos universitarios se les ocurrió una idea que cambiaría por completo el rumbo de sus vidas.
«Nosotros queríamos devolver esas fiestas de económicas y la Universidad no nos dejó llevarlo adelante», cuentan los jóvenes. Por ello, decidieron rehacer la fiesta en un recinto privado y, con ayuda de un promotor, crearon su propia marca. Así surgió el nombre que ahora resuena como uno de los mejores festivales nacionales: el Monoloco Fest. «A un amigo le vino la imagen de Homer Simpson con el mono de los platillos cuando se queda atontado mirando a la nada. Nos gustó la idea de tener un mono como mascota». Actualmente ya han realizado seis ediciones, cada cual más grande que la anterior.
La inocente intención de retomar las espichas y hacer felices al resto de universitarios comenzó un 6 de abril del 2022 en la Plaza de Toros de León. Hubo 4.000 asistentes. A día de hoy llenan recintos de entre 10.000 y 20.000 personas. «No nos lo imaginábamos. De primeras iba a ser una fiesta puntual por la fiesta de nuestra facultad y se ha convertido en uno de los festivales más grandes de la zona».
El Monoloco Fest se caracteriza por tener un público muy entregado. Todo el mundo conoce su origen leonés y, como tal, son apoyados por los de su ciudad. De hecho, al inicio del proyecto cuentan que no les hizo falta adelantar demasiado dinero, ya que las entradas se vendieron muy rápido. Otra situación que demostró cómo el público se vuelca con ellos fue en la edición pasada, cuando ganaron el premio otorgado por el público al Mejor Festival Nacional del Año de los «Premios Fest 2023». Se trató de un hito para el evento, ya que en el concurso participaron los cien festivales más grandes de España, quedando por delante de algunos de renombre como el Sonorama Ribera o el Boombastic Festival.
Para conseguir esa fidelidad por parte de los asistentes, intentan que el Monoloco Fest no sea únicamente un día del año, sino que exista siempre esa interactividad. Como universitarios, notan esa lealtad en sus facultades. Cuentan cómo no se habla de otra cosa cuando se va a anunciar a un artista. O la vez que hicieron Tinder Monoloco, una versión de la aplicación de citas. También realizan muchos juegos que enganchan a la gente durante el resto del año, como esconder 1.000 euros en la ciudad de León o entradas para el festival en la Universidad de Valladolid. «En otros festivales tú vas al festival, pero no le sigues durante el resto del año», dicen.
Esta inspiradora historia comenzó con cinco chicos de la mano de una promotora. A día de hoy Diego y Héctor son CEO de la empresa «Déjame Pensar Producciones», con la que organizan el festival que nació de estas inquietudes tan características de la generación actual, además de llevar otro tipo de proyectos. «El formato de empresario de corbata y súper serio ya no nos gusta. Por eso han triunfado cosas como Recreo o como nosotros».
Detrás de cada día que organizan para cada edición del Monoloco Fest hay más de 200 personas trabajando. Seguridad, artistas, camareros y otros cargos se ocupan de que todo ocurra tal cual se prevenía. «El primer evento nos quedamos sin bebida a las tres horas de empezar», dicen los dos universitarios recordando cuando aún eran novatos en el mundillo. Y para que esto no vuelva a suceder, además del personal el día del evento, son alrededor de ocho personas las que trabajan el resto del año para sacar el festival adelante.
La próxima fecha a la que sus seguidores esperan es la del 27 de abril en la Antigua Hípica de Valladolid. Será la primera vez que pisen la capital y están nerviosos por ver la primera impresión del nuevo público, pero con muchas ganas. Además, aseguran querer volver en próximos años por el gran apoyo recibido por parte de la ciudad
En los carteles del festival se concede un espacio para los «Local Heroes», destinado a los artistas locales. «Nos volvemos locos por los artistas internacionales o los que están de moda del sur, cuando hay mucho talento en Valladolid o en León», aseguran los chicos. Quieren apoyar a artistas emergentes para ayudarles a obtener visibilidad. En la edición de Valladolid ocuparán este puesto tres pucelanos: Ani Queen, Arjuan y Mixeer.
Mixeer lleva alrededor de 10 años produciendo y pinchando. Mezcla reggaeton y pop con house y techno. El artista reitera la necesidad de oportunidades así para darse a conocer y agradece al Monoloco por ofrecerles ese espacio: «Estas oportunidades son muy buenas y necesarias para el talento de la ciudad». Por otro lado, Arjuan y Ani Queen se enmarcan dentro del género urbano. Ambos ofrecerán shows muy distintos. El primero intercalará entre temas tristes y bailables. «Quiero provocar una montaña rusa de emociones», cuenta. Mientras, Ani Queen se siente orgullosa de poder actuar en Valladolid: «Es una gran oportunidad para hacer este show, que tenía ganas de hacer en mi ciudad».
Después de este gran día, los leoneses esperan en el Palacio de Congresos y Exposiciones el 15 de junio. «Para León tenemos este año otra sorpresa que anunciaremos cuando pase el de Valladolid, para hacer un poco más grande el festival», confiesan los organizadores. Cantantes como Cali y el Dandee, Ana Mena o JC Reyes serán cabezas de cartel en estas dos próximas ediciones. Además, dentro del festival contarán con food trucks, juegos, sorteos, zona de hinchables, toros mecánicos e incluso un globo aerostático.
Mientras tanto, estos dos jóvenes seguirán trabajando para moverse hacia otras ciudades y géneros musicales que gusten a la gente. «Hacer la marca grande solo trae cosas buenas», aseguran. Tienen claro que quieren crear un evento social para que cualquiera pueda acercarse a disfrutar de un baile con la mascota del evento: el Monoloco.