SELENA SAN JOSÉ VIVAS  |  Fotografía: Selena San José

El Programa Europeo de Movilidad Erasmus es uno de los proyectos para universitarios más reconocidos y con mayor participación. Cada año, un gran número de estudiantes piden formar parte de esta experiencia, saltar a vivir a otro país para conocer otra cultura, utilizar un idioma del que tienen poco conocimiento, conocer gente diferente, etc.

A pesar de que, en un principio, todo lo que destaca son puntos positivos, hay que tener en cuenta que también tiene sus desventajas. Y es que como muchos estudiantes afirman “un cuatrimestre te va a saber a poco, pero el año entero se te va a hacer cuesta arriba”.

A decir verdad, cuando se habla de Erasmus todo parece perfecto y maravilloso, pero una vez sumido en la experiencia hay que afrontar demasiadas cosas y salir adelante por tu propia cuenta. Sin embargo, eso no quita que sea una gran experiencia que todo quien quiera y pueda lo debería hacer.

El programa cuenta con numerosas ventajas y aspectos realmente positivos, pero también tiene algunas desventajas que son necesarias a tener en cuenta, para luego tomar la mejor decisión.

VENTAJAS

Querido futuro estudiante Erasmus, le recuerdo que nunca volverás a ser el mismo una vez vuelvas, vas a cambiar, y te explico por qué:

Permite aprender idiomas: el aprendizaje del idioma es algo que se realiza dentro del entorno natural del día a día, por lo que aprenderás las diversas expresiones coloquiales de la región, mejoraras la pronunciación y aumentaras tu vocabulario. Es más, en algunas universidades de destino te dan la opción de realizar un cursillo gratuito con la posibilidad de aumentar tus créditos.

Conoces a personas de otros lugares: de otras comunidades o de otros países. Cuando estudias en el extranjero, terminas conociendo gente te guste o no. Conocer gente de diferentes culturas te permite aprender cosas nuevas, ver otra forma de hacer las cosas y mejorar tus conocimientos.

Es un reto personal: y es que tenerte que sacar tus propias castañas del fuego es un reto y te ayuda a madurar en ese aspecto de ser independiente. Además, se le suma a tener que adaptarse a costumbres y estilo de vida diferentes que hacen que obtengas un mayor nivel de seguridad, confianza e independencia sobre ti mismo. Diría que este es el aspecto más importante de mejoría en un estudiante Erasmus, por eso os he mencionado anteriormente que nunca volverás a ser el mismo o misma, por que as mejorado.

Aumenta las oportunidades laborales: el Erasmus ya no solo te permite mejorar académicamente, si no que en un futuro las empresas valorarán positivamente el hecho de haber cursado estudios en el extranjero. Completar este programa significa que tienes la capacidad de adaptarte y mejorar los valores que demandan cada vez más las empresas. Si bien a muchas personas no les gusta la idea, también te facilita encontrar trabajo en el país de destino.

Una cámara reto con fotos polaroid de viajes
INCONVENIENTES

Siguiendo con la parte fea y la menos deseable por los estudiantes, pero que todos deberían conocer e ir con la idea para hacerlo lo mejor posible.

Su coste no es totalmente económico: a pesar de que es una beca, y la mayoría de Universidades ofrecen ayuda económica a mayores, tener que cubrir con los gastos relacionados con los estudios y la manutención, no siempre es suficiente. Y por más que se elija un país con un nivel de vida económico más barato, es inevitable no poder pensar en el mayor gasto. Aunque se tenga Beca de Ministerio, de la Junta y de parte de la misma Universidad; el tener que ir a comprar para poder subsistir, pagar un alquiler, unos gastos académicos y unas devociones; tiene sus costes y no precisamente baratos.

No todos los países son tan flexibles en las asignaturas: hay muchos estudiantes Erasmus que, por irse a un país, como por ejemplo Italia, donde el idioma es más parecido les permite no concentrarse tanto en los estudios, debido a que les facilitan mucho los métodos de calificación. Sin embargo, hay otros tantos que aun asi tiene que hacer un esfuerzo por aprobar los exámenes y las asignaturas en otros idiomas que no son el suyo. Esto requiere que se mantenga un ritmo de estudios diario.

Distancia: puede ser un clásico, pero creedme cuando os digo que se añora. La vida es algo que esta lleno de imprevistos, algunos muy buenos y otros no tan buenos. Y ahí es cuando te replanteas si de verdad merece la pena alejarse tanto. Pero, al fin y al cabo, y mas tarde que pronto, es algo que todos en un futuro tenemos que experimentar. La vida es asi y hay que tomar decisiones dentro de ella por mucho que no nos gusten. Tienes que valorar y tomar una decisión.

Hábitos: una vez llevas bastante tiempo acostumbrándote a la vida erasmus, luego no hay quien te quiete esos habitos de la cabeza. Tu vida la ves como una aventura constante y no quieres hacerte a la idea de tener que volver a la ‘rutina’, y volver a poner ‘los pies en el suelo’.

A pesar de que ahora, después de leer este artículo, probablemente tu idea de Erasmus haya cambiado, dándote mi más sincera opinión, irte de Erasmus es de lo mejor que te puede pasar en tu etapa universitaria, ya no solo por la fiesta, los viajes o el relacionarte con gente nueva. Es más, yo diría que lo que me llevo del Erasmus es haber crecido como persona, haber madurado en ámbitos de la vida que pensaba que tal vez no me podían pasar a mí, y haberlos afrontado en otro país me ha ayudado a saber que soy capaz de solucionar los problemas por mi misma.  Es cierto que los últimos meses ya deseas volver a casa y reencontrarte con tu familia y amigos, pero también se que el último día me va a dar mucha pena y nostalgia tener que decir adiós a un año lleno de experiencias, viajes y convivencias que han hecho de mi Erasmus algo muy particular.

Por este mismo motivo, si tú, lector, estas pensando en irte de Erasmus, no te digo que te vayas todo el año, pero aprovecha la oportunidad, disfruta y vive la experiencia, seguro que ganas.