IRENE HERRERO ALONSO | Fotografía: Pixabay. (Montaje por Irene Herrero) |
¿Qué es la desinformación? La desinformación se solía desarrollar en el ámbito periodístico, pero con la llegada de Internet y las redes sociales, cualquiera puede inventarse información y crear bulos. Esto es peligroso ya que puede hacer que la población se crea esa información falsa y la tome como verdadera.
La desinformación antes solo se encontraba en los medios de comunicación, a los cuales afectaba negativamente en su reputación. Actualmente, además de en los medios podemos ser desinformados en redes sociales, las más habituales son Facebook, Twitter o WhatsApp.
Lo importante es saber que no toda la información de las redes sociales es real, y que podemos ser engañados en cualquier momento. Las noticias, o las cadenas de mensajería, que llegan día a día a nuestros smartphones podemos comprobarlas, y ver si son reales.
Lo primero que deberíamos hacer es buscar la información en otras webs y contrastar la información, pero si se trata de un vídeo o una fotografía esto será más complejo. En ese caso, la Universidad de Harvard tiene una organización llamada “First Draft” que se dedica a combatir la desinformación junto a los medios de comunicación.
“First Draft” ha creado una guía en español que nos ayudará, en tan solo cinco pasos, a saber, si una foto o vídeo es creíble o no. En las dos versiones de verificación visual, recomiendan que te realices unas preguntas: si lo que estás viendo es la versión original, si sabes quién, dónde, cuándo y por qué se realizó esa foto o vídeo.
La opción más importante es buscar en las bases de datos de bulos, como “Maldito Bulo” en español o “Snopes” y “FactCheck” en inglés, donde recogen y desmienten los bulos que aparecen en las redes sociales, sobre todo en las cadenas de WhatsApp.
El Centro Gabo, perteneciente a la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI), recoge en un artículo llamado “Todo lo que debes saber para evitar la desinformación en redes sociales” varios métodos para verificar la información. Recomiendan que en nuestro navegador tengamos las extensiones de “Maldito Bulo” o “BS Detector” que nos alertarán inmediatamente si lo que estamos leyendo es información falsa.
La desinformación es inevitable, ya sea en medios de comunicación o en Internet. Comprobar y contrastar la información ya no solo es el deber de un periodista, sino que también es el deber del propio lector.